Paquita Ferrándiz
Actriz
Nacida en Barcelona, en el barrio de Sant Antoni -donde viviría toda su vida y al lado del Teatre Romea (“su teatro”)-, Paquita Ferrándiz fue una actriz precoz. Debutó en el teatro en 1928, a los siete años, con ‘La gloria’ de Ramon Garriga. En 1932 interpretó ‘La volta al món en patinet’ de Jordi Canigó en el Teatre Romea, y el 1935 estrenó ‘Roser florit’ de Josep M. de Sagarra en el Teatre Novedades. Sagarra, al darse cuenta de sus dotes interpretativas, le escribió el papel de Maria Ángeles.
De 1931 a 1939 fue miembro de la compañía Vila-Daví. Los primeros años de la posguerra, hasta 1946, y junto con su marido, el actor Pedro Gil (1905-1995), actuó en algunas de las compañías de teatro más prestigiosas del momento en el Estado español como las de María Fernanda Ladrón de Guevara, Guadalupe Muñoz Sampedro, María Bassó-Nicolás Navarro, Enric Guitart o Ana Adamuz.
Artista decisiva en la reanudación del teatro catalán, Ferrándiz estrenó múltiples obras de Sagarra como ‘El prestigi dels morts’ (1946), ‘La fortuna de Sílvia’ (1947), ‘L’hereu i la forastera’ (1949), ‘Els comediants’ (1950), ‘Les vinyes del Priorat’ (1950) y ‘Soparem a casa’ (1960, última obra del escritor). Otros autores interpretados por la actriz en aquellos años fueron Carles Soldevila (‘Civilitzats tanmateix’ y ‘Fuga i variacions’, 1947), Àngel Guimerà (‘Mossèn Janot’, 1947), Xavier Regàs (‘Tieta’, 1947 y ‘Tobruck’, 1949), Ferran Soldevila (‘L’hostal de l’amor’, 1949). En 1951 representó ‘Bala perduda’, de Lluís Elias, que se mantuvo en cartelera durante ocho meses.
Entre 1952 y 1955 (y siempre junto a Pedro Gil) fue la primera actriz de la compañía de Alejandro Ulloa, con la que hizo giras por América (Cuba, Costa Rica, Nueva York –lograron un éxito triunfal en Broadway–) interpretando clásicos como Lope de Vega, Calderón de la Barca, Shakespeare o Zorrilla, y con más de 30 obras en repertorio.
En 1955 inauguró el Teatre Alexis (que funcionó entre 1955 y 1963) con la obra ‘Camarada Cupido’ de Xavier Regàs. También trabajó bajo la dirección de Esteve Polls y de Ricard Salvat y, en los años sesenta, con la Compañía Adrià Gual (‘Aquesta nit improvisem’ de Pirandello, 1967).
En el año 1960 ganó el premio de interpretación especial del Ciclo de Teatro Latino por el papel de Antònia de ‘La dida’, de Frederic Soler. Otros montajes remarcables en que actuó son ‘Joc de taula’ de Enric Ortenbach (1962), ‘Fang’ de Eduard Criado (1963), ‘Cara de plata’ de Valle-Inclán (1968), ‘Pedro de Urdemalas’ de Cervantes (1968, en la inauguración del Teatro Calderón de la Barca de Barcelona), ‘El malalt imaginari’ de Molière (1969) y ‘Los delfines’ de Jaume Salom (1969). Ya en los años setenta actuó en ‘La filla del mar’ (1971) de Àngel Guimerà, ‘Las troyanas’ (1974) de Euripides/Sartre, ‘Terra baixa’ (1976) también de Guimerà y ‘Les arrels’ de Arnold Wesker (1979). De la década de los ochenta mencionar ‘Pigmalió’ de George Bernard Shaw (1981) y, el 1983, la exitosa reposición de ‘El Cafè de la Marina’, de Sagarra.
En reconocimiento a su trayectoria, Paquita Ferrándiz fue galardonada con el premio Ciutat de Barcelona (1981) y con la Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Catalunya (1983) por su contribución a la recuperación y difusión del teatro catalán, hecho en el que había contribuido con grandísimo acierto al protagonizar muchísimos espacios dramáticos para la televisión.
La también actriz Maife Gil i Ferrándiz es fruto de su matrimonio con Pedro Gil.